Iniciativa Moción:
Modifica la ley N° 20.370. Incorpora la asignatura: Educación Inclusiva para todos.
Consiste en: Incorporar al plan nacional de educación la asignatura de Inclusión para los estudiantes de 5 básico a 4 medio en primera etapa hasta ampliar la cobertura a todos los niveles de la educación nacional.
Descripción del problema:
La sociedad a nivel mundial, se ve enfrentada a varios fenómenos que cada día se agudizan tales como la migración, la urbanización, los cambios climáticos, el envejecimiento de la población, entre otros. Una realidad mundial, país y local que no podemos obviar. Este fenómeno también es apreciable en nuestras escuelas del país donde hoy por hoy el respeto por la diversidad y la inclusión es un tema a considerar, ya que la llegada de actores nuevos a nuestra realidad nacional y local, nos obliga a tomar medidas sobre las prácticas propuestas para enfrentar dicha diversidad y necesaria inclusión. La presencia de esta pluralidad social generada por la migración, el avance de la urbanización y la escolarización necesaria, genera que estos diversos actores se encuentren en un mismo espacio, la Escuela. La escuela aparece como un mundo fragmentado y conflictivo (UNESCO, 2005) fiel reflejo de una sociedad marginal que no logra integrarse al proceso de modernización, que los deja a un lado. Esta práctica va reproduciendo el sentimiento de exclusión que los hace permanecer aislados y con pocas posibilidades de incorporarse y ser incorporados a la realidad social en la que están, de una u otra forma, inmersos. Según las cifras entregadas por Endisc, 2004 , los niños con discapacidad a nivel nacional: 8,5% estudia; 72,54% no estudia y en la región de Tarapacá: 4,69% estudia; 95,31% no estudia. En el caso de los niños inmigrantes la encuesta Casen 2013, evidencia un 10,8% de niños de 15 o más años inmigrantes presentes en el sistema educativo nacional. En Tarapacá esta cifra llega a 5,7%.
Hoy las políticas públicas, están orientadas en propiciar el equilibrio dentro del sistema escolar chileno, necesario para poder respetar los derechos básicos “derecho a la educación” de todos los individuos, tal y como lo versa nuestra constitución vigente (Constitución 1980), por ello tanto en sus planes educativos, modelos y reformas, buscan entregar las oportunidades a todos los estudiantes sin importar su origen, condición social, nacionalidad, genero, etc.
Durante el 2015, se aprobó la ley de Inclusión 20.845, esta tuvo como eje la inclusión y la libertad de elección, presentando la siguiente argumentación “En respuesta a este contexto, el proyecto busca reformar el sistema educativo nacional para promover la inclusión social, económica, étnica y religiosa, y cimentar valores como el pluralismo, el respeto por el otro, la responsabilidad y, en general, los valores cívicos y democráticos. Esta convicción se acompaña con la evidencia disponible que reconoce que los sistemas educativos inclusivos que disminuyen la segregación producen efectos positivos, tanto en los aprendizajes de los estudiantes como en los valores sociales y civiles que promueven”. (ley. 20.845, 2015). De esta manera, se busca entregar un reglamento que ayude en una primera instancia a propiciar un cambio de paradigma necesario y ofrecer oportunidades para la inclusión social.
Pero esta ley sólo se enfoca en dos problemas, el ingreso y el uso de los recursos públicos en el sistema escolar y no aprovecha de generar un cambio real dentro del sistema educativo nacional. Por ello consideramos indispensable la utilización de dicha ley para mejorar nuestra participación social dentro de las escuelas, generando instancias donde los estudiantes puedan potenciar sus habilidades, actitudes frente a estos temas tan relevantes que van en una sola línea ayudar a que nuestra sociedad sea cada día más empática con la diferencia.
Por ello proponemos: La incorporación de la asignatura de Inclusión a la malla curricular de quinto básico a 4 medio, en primera instancia y continuar hasta lograr la cobertura de todos los niveles de enseñanza. Tendrá como objetivo la implementación de la ley de inclusión desde el aula, propiciando en los estudiantes habilidades, fortalezas y el conocimiento necesario para que la efectividad de la ley se convierta en un hecho concreto dentro del establecimiento y de la sociedad en su conjunto, donde se garantice que cada alumno podrá contar con las mismas oportunidades en sistema educativo nacional donde se promueva la inclusión social, económica, étnica y religiosa, y cimentar valores como el pluralismo, el respeto por el otro, la responsabilidad y, en general, los valores cívicos y democráticos.
Propuesta de moción:
Inciso final:
Inclúyase la siguiente modificación a la ley Nº 20.370, General de educación.
Incorpórese al artículo 4 a continuación del actual inciso final, el siguiente inciso nuevo:
El Estado profundizará la inclusión educativa de los estudiantes, a través de la incorporación a la malla curricular de educación básica y educación media de los establecimientos educacionales de cualquier tipo de dependencia, la asignatura obligatoria de EDUCACIÓN INCLUSIVA, quedando de esta forma las cargas horarias anuales mínimas con la siguiente disposición:
• 5º y 6º básico sin jornada completa 1216 horas,
• 5º y 6º básico con jornada completa 1520 horas,
• 7º y 8º básico para 38 semanas de clases 1596 horas,
• 7º y 8º básico para 39 semanas 1599 horas,
• 7º y 8º básico para 40 semanas 1600 horas,
• 1º a 4º medio para 38 semanas 1746 horas,
• 1º a 4º medio para 39 semanas 1755 horas y,
• 1º a 4º medio para 40 semanas 1760 horas.
Inciso final transitorio: El Ministerio de Educación contará con un plazo de 3 años para que la presente ley se establezca definitivamente, agregando a la malla curricular de manera obligatoria la asignatura de educación inclusiva, tanto en segundo ciclo básico y enseñanza media, que tiene como principal meta fomentar el respeto a la diversidad y generar una real inclusión en nuestra sociedad. Este periodo será utilizado para decidir un programa evaluativo adecuado e implementar un proceso de cursos con el fin de que la comunidad educativa pueda recibir los contenidos a enseñar de manera efectiva y así transmitírselas a los estudiantes, cumpliendo satisfactoriamente el objetivo de la asignatura, bajo el marco de la ley Orgánica Constitucional de Enseñanza. Cumplido los tres años de implementación para poner en práctica el proyecto en sus etapa inicial 5 básico a 4 medio, la educación inclusiva debería estar presente desde el primer año del segundo ciclo básico hasta el último año de enseñanza media en todos los establecimientos educacionales del país, para así continuar con la iniciativa hasta los niveles iniciales del sistema educativo chileno.