La ley 21.100 tiene como objetivo proteger el medio ambiente mediante la prohibición de entrega de bolsas plásticas en el comercio establecido. Se entenderá por medio ambiente a el conjunto de componentes físicos, químicos, biológicos y sociales capaces de causar efectos directos o indirectos, en un plazo corto o largo, sobre los seres vivos y las actividades humanas. (Definición de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente en Estocolmo 1972). Por su parte la ley 21.100 define como bolsa plástica: bolsa que contiene como componente fundamental un polímero que se produce a partir del petróleo y bolsa plástica de comercio: bolsa plástica que es entregada por un establecimiento de comercio para el transporte de mercaderías o, en el caso de compras realizadas por medios electrónicos, bolsa para el transporte de mercaderías que es entregada al consumidor final . En la ley 19.300 se expresa que las personas tienen el derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación, la protección del medio ambiente, la preservación de la naturaleza y la conservación del patrimonio ambiental. Según la Constitución de Chile, en el Art. 19 N° 8 El derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación. Es deber del Estado velar para que este derecho no sea afectado y tutelar la preservación de la naturaleza. La ley podrá establecer restricciones específicas al ejercicio de determinados derechos o libertades para proteger el medio ambiente. Es por esto que, la necesidad que se tiene es la reformulación de ley, teniendo un soporte legal conforme a la ley y que tiene como finalidad mejorar el proceso de eliminación de bolsas plásticas.

A inicios del siglo XX, el modelo empresarial empezó a modificarse. La llegada del mundo de la moda, del mundo automotriz, y el mundo de lo práctico hizo que la industria evolucionara, cambiando el paradigma de lo duradero, por el paradigma de lo desechable, de lo nuevo, y de lo cómodo. Es así como el plástico pasó a tener un rol fundamental en el comercio, un material barato, originado a partir del petróleo, caracterizado por ser moldeable, ser versátil y tener gran resistencia química convirtiéndolo en un material indispensable en la vida humana. La creación de los envases desechables fue uno de los grandes cambios en el comercio. Son productos de un solo uso, que dan valor agregado, facilitan la producción industrial y que generan (en la mayoría de casos) comodidad, seguridad e higiene para los consumidores. Esto ha generado que aumente la producción de residuos, especialmente la de plásticos, generando grandes problemas de contaminación ambiental. Debido a su gran resistencia química, estos tienen larga vida y una degradación muy lenta, produciendo acumulasiones de polimeros en diversos ecosistemas de nuestro planeta.
Es por esto que diversos países del mundo han implementado medidas de control de producción y consumo de este material, Chile no siendo la excepción, implementando la ley 21.100, que prohíbe la entrega de bolsas plásticas de comercio, pero ¿qué pasa con todos los otros envases?.
A partir de la lectura y posterior análisis de la ley 21.100 se pueden generar una serie de modificaciones e incluir ciertos aspectos a esta, las cuales apelan a una preocupación constante por el cuidado del medio ambiente. Es por ello que, primero que todo, se propone la modificación en el Artículo 3 de la ley, haciendo necesaria la implementación de más puntos verdes o puntos de reciclaje a lo largo del país, es decir, incentivar a la población a ser uso de estos puntos de forma constante, permitiendo mejorar la conciencia medio ambiental.
Además, se busca incluir la eliminación total de bolsas primarias, proponiendo el comercio a granel, que la población pueda ingresar al comercio con su bolsa propia y hacer las comprar respectivas o en su defecto que los alimentos primarios (por ejemplo frutas y verduras) sean vendidas en malla.
Junto con ello, se puede aplicar un impuesto por cada bolsa plástica utilizada en el comercio, con el fin de evitar su consumo excesivo, ya que se observa que mucha gente extrae más bolsas de las que utiliza con el fin de otorgar otra funcionalidad a estas, por ejemplo, utilizandolas como bolsas de basura.
Por su parte, lo que el comprador comenzó a utilizar a partir de la aplicación de esta ley, son las bolsas reutilizables, las cuales generan una significativa huella de carbono, al igual que las bolsas de papel. Como opción, proponemos el uso de bolsas de algodón, las cuales son reutilizables y provocan una disminución del impacto medio ambiental.